19 de febrero de 2013

Ya nada es lo que era..

         Acabo de salir de mi examen de alemán, tema que aún tengo pendiente con vosotros pero que tengo reservado para una mejor ocasión. Y bueno, he llegado a casa y se me presenta una tarde tranquila, por lo que he decidido dejar la poco tarea que tengo para después y aprovechar desconectar un rato.

          Y es que, yo ya no puedo con tantas mierdas a mis espaldas, cargado de exámenes por todas partes, a cada cual más largo y difícil, que vienen acompañados de tareas, trabajos, y academias o actividades extraescolares, que no sirven para otra cosa que para hacernos perder el tiempo que tanto necesitamos por las tardes.

           Y desde aquí, desde Melilla, mi ciudad, os digo que si alguna vez dije que quería ser mayor, hay muchos aspectos en los que me siento arrepentido. Porque, ¿ quién no echa de menos esos días en los que volvías del cole, diciendo a tus padres que no tienes tarea y que has sacado un 10 en conocimiento del medio, y te echabas una siesta que ahora, salvo días como hoy, son prácticamente inimaginables?¿ Y cuando te despertabas no tenías otra cosa que hacer que darte un baño calentito y ver la tele hasta que te entraba el sueño a las 10 y media de la noche?

        Pues bien, yo si que lo echo muchísimo en falta, lo necesito tanto como el respirar, pero ya no hay vuelta atrás en esta espiral de estudios y obligaciones, y eso que soy consciente de que aún no ha llegado lo peor de todo..

        Pero aun así, todo hay que decirlo, cuando eramos pequeños no lo llegábamos a pasar tan bien como nos lo podemos llegar a pasar ahora; ir a la feria solo con los amigos, quedarnos a dormir con ellos, ir a cenar... En fin, toda esa libertad que de pequeños tampoco teníamos.

      En fin, nada más que contaros amigos, me alegro de que mi proyecto de blog os vaya interesando, aunque tampoco pretendo nada fuera de lo común. Ya iré publicando mis ideas futuras, y aquella que os tengo pendiente.
   

     Gracias, y hasta pronto..

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