Algunos días oscuros, otros más visibles.

Muy buenas noches mariconas, cuatro meses después de la última señal de actividad en el amago éste os pongo al día los mejor que pueda.

Tras mi triste vuelta de Austria, dejando atrás la que hasta ahora ha sido la mejor experiencia de mi vida, tocaba volver a Melilla a convivir con mi compañera de intercambio austriaca durante los tres meses que le quedaban aquí. Esta convivencia empezó cuando 10 días después de mi vuelta nos tenían preparado un viaje al desierto en Marruecos. Nos fuimos junto con otro grupo de familias, acabé encantado de haber visto las montañitas de arena de las que me hablaban, y de haber conocido chavales y chavalas de mi edad.

Nada más volver tocaba volver a ver a los de siempre, todos los días otra vez a aguantar el mal trago de las mañanas. Ese ha sido sin duda el trimestre más duro de mi vida, nunca me había costado tanto ponerme a estudiar y tomarme en serio las clases, aunque al final tras algún traspié que otro salí sano y salvo de aquella emboscada. Lo de la vida académica entró en rutina mucho antes de lo que podía esperar.

En cuanto a la vida social, está cayendo a pique la cosa, es decir, si apenas había, está desapareciendo, o lo que es peor, estando para mal. El gay de Dani está 24/7 enganchado a Ana, lo que lo deja nulo para hacer cosas con los chavales sin que esté ella presente. Saludos a Ana, una tía de puta madre. Ricar se echó una perica en condiciones pero lo está llevando con más naturalidad. El resto nada. En fin, lo de ir al burger se convirtió en rutina, algo automatizado de viernes o sábado por la noche, con el fin de ver alguna que otra chavala, sabiendo que ninguno nos íbamos a comer nada, eso es cosa de la cantera del gimnástico, pero bueno, se está a gustito allí la verdad. El nivel de periqueo está en negativo, me he quedado atrapao.

En cuanto a Sophie, mi austriaca, acabó hablando español mejor que muchos de mis amigos y conocidos, ha sido una hermana al 100%, una más de la casa adaptada a la perfección, ojalá todas fueran como ella tío. Realmente no puede explicarse. Añadir que su despedida fue una de las cosas más tristes que he vivido en mucho tiempo, en ningún caso hasta nunca, pero un claro "no sé cuando nos encontraremos" que preferiría no tener que vivir más. Que se le va a hacer, esto está cada día más duro.

Y por último, con respecto a lo que llevamos de verano, decir que está siendo muy completo, estamos haciendo muchas cosas los chavales que hasta ahora no habíamos hecho, como podría ser levantarse a las seis de la mañana en bici para ir al dique a ver el amanecer o ir a playas a mar abierto como si fuese una aventura. Jose y yo hemos estado yendo a correr, aunque luego se nos unió Isma, que maricona que me ha dejado tirado esta mañana. Lo ir al burger ha llegado a tocarme los cojones, porque es que no hay juventud en otro sitio que no sea ese o los botijos, y siguen dándome miedo, así que no hay remedio. Aunque estos últimos diez días nos hemos metido en casa de Charly de mala manera, agradecérselo desde aquí, grande. Pero todo esto acabará de nuevo en el mismo sitio, lo sabemos todos. La semana que viene me voy con Álvaro de campamento a Álava, donde espero que todo esto se despeje un poco y donde también espero conocer mucha gente nueva, que ya va tocando. Aquí nos tenemos todos muy vistos.

Nada más por esta vez que seguro que estáis hasta los cojones por haber leído hasta el final. Vaya un camisetón de portugal que me he pillao por quince pavos hermano

No es un adiós cualquiera.

Muchas veces nos han dicho ya que nada en esta vida es para siempre, ni siquiera la felicidad. Desde hace ya un par de semanas eso está pasando a la práctica. Sólo pretendía contaros lo poquísimo que me arrepiento de haberme venido aquí, y que lo volvería hacer sin ni siquiera preguntar a nadie. Que sí que es duro echar de menos a los que se quiere, no lo pongo en duda ni un instante, y que al fin y al cabo no todo acabo siendo como lo pintaban, ni para bien, ni para mal.
Que supieseis la de personas tan maravillosas que he conocido, y con las que por supuesto quedarán muchísimas cosas pendiente. Sí que son fríos, sí que quieren de otra manera, y que el cariño cuesta apreciarlo, pero desde un primer momento ha estado ahí, no sé, es muy complicado expresarlo desde dentro a los que no lo están.
¿Que por qué todo esto? Simplemente porque seis meses es algo pasa sin que uno se de cuenta, ya se han ido, la semana que viene a estas horas mi maleta ya estará cerrada, yo estaré en un estado desolador, tirado en la cama sin dormir ni un solo minuto. Y a la mañana siguiente estaré tomando un vuelo con destino final en Melilla, por suerte o por desgracia, no lo sé...
Muchas cosas que estoy dejando atrás, esto no ha sido ningún campamento de verano, en el que todos se prometen que volverán a quedar y a verse. Y sabemos todos que es mentira. Con esta gente he convivido día a día durante seis meses, han llegado a convertirse en mi rutina y me han hecho uno más de ellos. Dentro de lo que podía haber pasado, esta estancia ha sido un sueño, un capítulo aparte y a subrayar en mi vida, pero que se va. Y así, de repente, lo que es mi día a día, desaparece. Bienvenida sea esa jarra de agua fría ante esto. Todos aquellos a los que veo todas las mañanas y nos saludamos como lo que hemos sido, compañeros, junto con aquellos que no he llegado a conocer tanto, pero que con miradas fue suficiente, todos ellos, van a desaparecer para siempre.
Aquí he vivido todo aquello que nunca podría haber imaginado: amigos austriacos, conocer gente francesa en alemán, comprobar lo que realmente es convivir con otras culturas, aceptándolas, no vivir en un mismo sitio odiándonos los unos a los otros. No sé, cosas tontas y sin apenas importancia, pero que al fin y al cabo hacen a uno ver la vida desde más perspectivas, y afrontar de otra forma todo tipo de situaciones.Cosas tan impresionantes como hacer en seis meses de un país que no conozco, lo que será mi segunda casa.
En fin, esta semana va a ser una de las más duras de mi vida, sin duda alguna. Y sabiéndolo, sinceramente espero que pase lo más rápido posible.
Y a los que os da igual que me despida de ellos porque me vais a tener allí, ¿qué deciros? Nada más que en una semanita estoy allí plantado, para empezar de nuevo, o seguir donde lo dejé...

Un saludo muy fuerte a todos. 

Salzburgo, 27/03/2014

Juan

Resumiendo el porvenir.

68 noches amigos, 68 fugaces noches las que me quedan en este país. Imaginaos como estoy aquí, que a más de dos meses para mi vuelta, ya estoy sufriendo por ella. Y si algo me da razones yo volveré con gusto a Melilla, pero nada ni nadie las tiene tío. Vamos a ver, yo sé que en Melilla están mis amigos y familia, gente que echo de menos, pero si pudiese verlos evitando volver pues sería un auténtico detalle. Que tampoco es que aquí quede con muchos amigos y que haga muchas que vaya a echar mucho de menos, pero es que Melilla tío, la gente de Melilla en concreto, porque si la ciudad estuviese vacía sería preciosa, pero es me da bastante repulsión la gente. También me he llegado a plantear que sea yo el que le de asco a la gente, como en el chiste del nota ese que decía que todos los coches iban en dirección contraria , pues más o menos. Espero encontrarle remedio a esa sensación mía, porque no me queda otra que volver.
El caso es que por otro la me da la sensación de que van a pasar muchas cosas interesantes por Melilla, lo que también pienso es que sólo me pasa cuando estoy escuchando música de esa que me sube el ánimo, puede que tenga algo que ver. 
En cuanto a cómo me va a mí os digo que ha venido  nevar justo el fin de semana, y he pasado tanto sábado como domingo rodeado de nieve y deslizando colinas con trineos, que guapada. El 'runrun' de la tarea ya vuelve a darme por saco en la cabeza, y sigo sin saber dónde queda la chavalería joven que todavía tiene prohibido beber en esta ciudad.
Dejando otros temas a un lado, perica ninguna eh, pero ninguna de ninguna, de que ni el amago puedo hacer, que tampoco me he dejado la vida en ello es un hecho, que no tiene pinta de que vaya a cambiar porque sería ocupar el cerebro demasiadas cosas, y al final me explota.
Muy probablemente cuando vuelva a Melilla tendré el Fifa 14. Cosa mala. Me va a sacar de mi casa quien yo te diga. Aunque siendo sincero para todo también tengo ganas de hacer algunas cosas en Melilla, no muchas, está claro, pero alguna que otra sí. Lo del viaje de estudios lo vamos a ir dando por un intento tonto y pasajero, aunque me haría muchísima ilusión ir la verdad. Me llevan con Sophie, la niña con la que hago el intercambio, al desierto, apenas dos semanas después de llegar a Melilla, y yo la verdad es que no he ido al desierto pero que tampoco es algo que sueñe desde pequeño, pero que puede estar curioso para ser sinceros.
Bueno, seguro que tenía más cosas que contaros, pero como no me acuerdo, lo dejaremos para la próxima, ¿no?
Un abrazo muy fuerte, y hasta la próxima.

 

Con el paso del tiempo me doy cuenta de que hay cosas que por mucha ilusión que me hiciesen en su momento, como podría ser dar una vuelta a España, de pueblo pueblo, con una auto-caravana y tres colegas. Una vez ya bajados de esa nube, no todo tenía porque ser negativo, también hay muchas cosas que van ganando papeletas para que ocurran según vamos creciendo. Y finalmente cosas que simplemente llegaron sin darnos cuenta y que acabarán quedando atrás, véase mi estancia aquí. Pero bueno eso ya no tiene remedio.
Seguramente este haya sido un año de los que menos me pueda quejar, y con la misma seguridad podría decir que seguro que me esperan años mejores, o al menos me gustan tener esa idea en mente. Algunos, los más tontitos, comenzaron llamándolo el 2012+1, por esos de las supersticiones y los años de mala suerte y las tragedias. A mi como me dan igual porque me acabaré muriendo de la forma más tonta que se pueda pensar, pues tampoco tengo esas cosas muy en cuenta.
Y ahora hablando de la Navidad, ha estado bien, pero ha sido un poco rollo. Vinieron mis padres a visitarme con mi hermano, y la verdad es que me llevé una gran sorpresa porque no me dijeron que él venía, pero vamos, que no hemos hecho otra cosa que andar por el centro de Salzburgo como si se nos hubiese perdido algo por allí. En nochebuena comí/merendé/cené una doblecheeseburguer, sin verdura, sólo la carne y el queso, pero no es que hiciese las tres cosas, es que no comí, ni cené, ni merendé, pero me tomé una hamburguesa a las 6 de la tarde para poder seguir cumpliendo mi función vital de nutrición, que está algo descuidada. Y todo muy curioso. Me regalaron un reloj, un libro, y un juego de la DS, que me la trajeron de Melilla, y mi familia de acogida me regaló una entrada para el RedBull Salzburg-Ajax. La verdad es que estoy muy contento.
Lo triste de la historia es pasar la nochevieja solo, porque no hay cosa más triste que pasar una nochevieja sin los tuyos, pero bueno, intentaré hacerlo lo más llevadero posible y que se pase rápido. Y a seguir con mis planes, o mis proyectos de planes.
Bueno vamos a dejarlo aquí por este año. Espero que durante todo el año os haya medio interesado lo que escribía, y que si no, que tampoco me importa. Y que el que viene, os interese más o lo mismo( nunca menos ) me sigáis leyendo, aunque eso pueda interpretarse como el año que viene, o como mañana, ya cada uno le da el drama de turno.
Feliz Año Nuevo, y que os echen muchas cosas los reyes..

SE AVECINA LO BUENO

Miércoles, 18 de diciembre, -1ºC en la capital cultural austríaca. Sí señores sí aquí sigo, joder. Este último mes ha sido una auténtica locura, me faltan horas de sueño de todas y cada una de las noches que han transcurrido en él. Tareas que se han ido acumulando de forma bestial, los exámenes, que no necesitan presentación, de por sí solos se bastan y se sobran. Pero bueno siempre se sacan cosas buenas de las malas, ¿no? Pues os cuento las mías: he aprendido a calcular los distintos parámetros del movimiento circular uniforme, diferentes formas de dividir una célula, lo máquina que era Bécquer, y como resolver radicales con fracciones, entre otras cosas. Y todo eso sin la ayuda de ningún profesor que me explique diariamente nada, salvo el máquina de Ale que me ha mandado son 23 mensajes de 23 clases de física, grande como él solo, lo tengo que querer. Bueno, pues si os cuento aquí lo que me importa haber aprendido esas cosas, me llaman la atención por usar lenguaje demasiado obsceno sin previo aviso, y no queremos eso. Pero vamos que eso vendría a ser sinónimo de poco, muy poco, a decir verdad no me interesa una mierda.

Todo esto quedó atrás esta tarde, tras mandar una tarea de inecuaciones a la señora profesora de matemáticas que me ha puesto su pedazo de diez, que campeona la tía, eh.
Tras esta dura hazaña, soy libre. Tengo muchas cosas pensadas acerca de este hecho de libertad en una ciudad tan grande en todos los sentidos como es Salzburgo. Una de mis principales intenciones es salir a conocer gente por  la calle un fin de semana por la tarde-noche, para ver que surge de esta prueba que aún no he podido llevar a cabo, tengo muchas ganas. También quiero ir a correr un poquito y respirar el aire fresco de aquí en la orilla del río, que es fantástico. Vienen mis padres a visitarme y quieren que les haga de guía turístico. Quién me iba a decir a mí que a los quince años iba a guiar a mis padres por una ciudad extranjera de Centroeuropa, un despropósito muy gracioso.

Por otra parte, y última por hoy, las niñas se van dentro de muy poco para Melilla, y es algo que me tiene muy preocupado, porque a nosotros aquí les ha faltado tiempo para llevarnos a sitios guapísimos, pero, ¿a dónde se las lleva en Melilla? No sé, lo importante es que no soy yo quien se va a ocupar de eso los tres primeros meses, los que espero les basten para adaptarse al ambiente y que no necesite mucho de mi ayuda, aunque no me importaría dársela, claro está.

Finalmente comunicaros que publicaré la siguiente antes de acabar las vacaciones para contaros como me han ido los planes, y os dejo aquí algunas fotos de lo que he estado haciendo las últimas semanas. Si hay algo más que queráis saber para completar el resumen que os he hecho, un comentario y se soluciona sin pega.

Gracias por aguantarme otro día más. Hasta otra, ¡y feliz Navidad!

No veas la que está cayendo

Buenas chavales, ¿cómo vais? Yo tirando también, gracias.
A ver, hoy quería contaros que en esta última semana todo ha ido en la misma línea, con lo que no quiero decir que todo vaya igual, sino que unas cosas han ido a mejor, y otras han empeorado. Me explico:
En casa todo va bastante mejor, saben que me gusta el chocolate y me dan mucho chocolate, y como estoy de delgado que da miedo verme, siguen insistiendo en que coma, pero no hay narices de engordar tío, yo que sé, tampoco duermo menos por ello, y eso me es suficiente. También ha ido a "mejor" el tema del tiempo, es decir, que hoy está lloviendo de la forma más incómoda posible y no va a parar en todo el día, y no exagero, pero esta tarde/noche vamos a estar a temperaturas bajo 0ºC, lo que quiere decir que esa lluvia incómoda mañana será una nevada de las guapas, POR FIN. Llevaba esperándolo desde que estoy aquí y por fin la nieve está asegurada, vamos ahí a tope.
Por otro lado amigos, amigas, y demás gente, estoy a apenas diez días que me lleguen los 6 o 7 exámenes que tengo que hacer aquí en Austria para este trimestre, lo que me preocupa mucho, porque con toda la tarea que han ido mandando, lo único que he ido estudiando ha sido lo que me iba leyendo mientras hacía las actividades,  o sea poquito poquito, porque bueno las asignaturas más prácticas como matemáticas, haciendo actividades pues se puede hacer un avío, pero a ver como me las apaño para sobrellevar biología, historia y lengua, por ejemplo.

Pero como eso me da un poco igual hasta a mí, porque digan lo que digan quienes lo digan, yo vine aquí a aprender alemán y a aprovechar una oportunidad tan buena, y no mucho más. Ahora os cuento mis progresos:
Bueno, estoy muy contento con respecto a mi alemán, ya que soy capaz de entender más cosas y usar más tiempos verbales, e incluso ya soy capaz de quedarme con el concepto general de las películas y series que ve mi familia aquí lo que me han dicho que es muy positivo para llevar solamente mes y medio aquí, y yo también lo creo. Lo único malo es que de estrujarme tanto el cerebro para el alemán, el inglés se me está yendo a donde Cristo perdió la babucha, y hago unas mezclas anglo-germánicas más graciosas.. Pero en general estoy muy contento la verdad. Por cierto, dos anécdotas antes de acabar:
1. Ayer se vino Joel a la casa porque habíamos quedado con mi familia en que cocinábamos nosotros, e íbamos a hacer tortilla de patatas. Que desastre colega, nos salió una bazofia a tener muy en cuenta, pero solo tuvimos un fallo, para ser sinceros, y es que está gente tiene en vez de vitro de gas, pues la tienen de inducción, y eso va que explota, y se nos quemaron las patatas en el primer paso, y mi madre de aquí se quedó con la copla de nuestro error, y madre mía que dos tortillas de patata que hizo, una normal y otra con queso, weio. Me hacía falta la verdad.
2. Y bueno, lo segundo es que por fin me he dado mi primera vuelta en bici por la ciudad, que guapo estuvo. La mayoría del tiempo no sabía donde estaba, pero tenía claro que iba en la dirección correcta, no sé porque, al final todo fue bien y conseguí llegar a casa sano y salvo tras dos largas horas montando en bici. Eso es algo que tengo que repetir.

Y bueno nada más por hoy, ahora me bajaré a desayunar, un colacao y un panecito con Nutella, o dos..
Y a ver que surge de este día, aparte de la tarea y los exámenes..

Gracias, y hasta la próxima.

Pd: No sé si os conté que estuve en Viena en una reunión con la gente de Europa que también está en Austria, me decepcioné porque esperaba mucha gente y solo eramos nosotros, tres madrileños, y dos checos, vaya tela. Os dejo una foto..

Mejor de lo esperado.

Pues nada, que estaba yo durmiendo que llegué anoche a las 2 de la madrugada de Venecia, y que me he desvelado, y eso me da un ratito para que os cuente como se siguen moviendo las cosas por aquí.

Después de aquella entrada que hice nada más llegar la gran mayoría no habéis sabido mucho más de mi, ya que entre que la familia nos está llevando a mil y que los profesores parece que no quieren que haga mucha vida por aquí, no sé, a lo mejor son sólo sensaciones mías, pues que no he podido estar muy en contacto con nadie, ni siquiera con mi familia todo lo que me hubiese gustado.

Al caso, desde que os escribí aquel día 6, han pasado cientos de cosas, como por ejemplo que empecé el instituto de aquí. El instituto es una brutal pasado comparado con lo que me pueda volver a encontrar cuando tenga que volver a Melilla. Taquillas personales al entrar para dejar tus zapatos e ir en calcetines por la vida, descanso REAL Y EXISTENTE de 5, 10 o 15 minutos entre clase y clase, para comer beber, jugar al pinpon, o simplemente estar de chillin, pero que se puede salir de la clase. Con respecto a los compañeros estoy bastante contento, ya que están todos muy acogedores y me ayudan un montón, no como lo que podría pasar en Melilla con respecto a bromas varias que seguro alguna se hace a un alemán/austriaco, del estilo "¿te gustan las salchichas, no? jiji". Pues no, estas cosas aquí no pasan, y es de agradecer que no se rían de ti cada vez que digas una burrada mal dicha. En fin, otra forma de ver las cosas.
Por otro lado, como tenemos clases que ellos dan y nosotros no tenemos por qué, nos dan horas libres, y las horas libres las puedes usar para salir a la calle, sin ningún guardia en la puerta que te pida justificante, sales, y cuando tengas que volver vuelves y punto. Pues eso, como coincido muchas horas libres con Joel por ejemplo, estamos aprovechando para salir mucho y descubrir Salzburgo por nuestra cuenta, que es como realmente se aprende. El miércoles por ejemplo, nos fuimos los tres a la pista de patinaje sobre hielo que tenemos a 10 minutos andando en dos horas libres que nos coincidieron y echamos el rato ahí, que la verdad es que es una pasada, y Eloy se cae todo el rato, hasta con el patinete de ayuda. Que risas que me echo con Joel.
Cambiando de tema, empecé a jugar en un equipo de fútbol de aquí, y después de tres semanas entrenando hoy por fin juego partidito, vamos a echar el rato, a ver como se da la cosa. Y bueno hablando de fútbol y demás, al día siguiente de que la familia nos descubriera la pista de patinaje sobre hielo, nos llevaron a ver un partidazo del RedBull Salzburgo. Madre de mi vida que ostias, pero señoras ostias eh, no exagero, ni contacto ni golpes, nada, ostias como panes que se daban los chavales, y la gente de aquí con total normalidad, pero claro, yo era el cateto que no había visto un partido de hockey hielo en la vida y me sorprendía todo, una pasada. Aparte de eso, el jueves nos dijeron que nos iban a llevar a un sitio por la noche, pero no nos dijeron a dónde, después de mucho insistir nos dijeron que íbamos a la ópera, nos estuvimos probando trajes y todo, y yo estaba pasando mucho miedo sin llegar a creerme lo que estábamos a punto de hacer. Antes de que nos dijeran eso yo dejé caer que los jueves hay Europa League, y que a lo mejor nos podían llevar ahí, pero seguían con lo de la ópera. Cuando llegaron al punto en que casi nos ven llorar porque no queríamos ir a la ópera nos dieron las entradas del partido del RedBull Salzburgo, pero esta vez de fútbol. ¡Ouh! Un partido de Europa League tío. Realmente los dos equipos eran medio cojos y no hubo demasiado espectáculo, pero el ambiente que hubo lo hizo parecer impresionante.
Para alcanzar el clímax de la felicidad, hace tres días sacamos unas entradas de Champions para ir a ver al Allianz Arena un Bayern de Múnich-Mancheser City. Nada más que añadir, lo que sentí en ese momento lo dejo abierto a vuestra imaginación.
Para rematar todo esto y acabar por hoy,  por si la familia no se estaba portando bien con nosotros, ayer cogen y nos llevan a Venecia tío, siempre había deseado conocer Italia, y más concretamente Venecia. Que pedazo de ciudad, que bonito todo, la verdad es que es una pasada, estoy viviendo cosas que ni se me pasaban por la cabeza cuando dije de venir a esto, disfrutando como un enano, y además, te hinchas de reír porque cada dos por tres te para un japonés para que le eches una foto, y es muy gracioso.

En fin familia, que estoy encantado aquí la verdad, no garantizo que el 4 de abril esté en Melilla, lo dejo caer ya, jajaja. Y nada, muchas gracias por seguir acordándoos de mí, si la leéis se la podéis recomendar a alguien que sepáis que no la ha leído aún y que le pueda interesar, si veis que os apetece, si no ni caso.
Pd: Os adjunto un huevo de fotos.

Sensaciones muy positivas. Gracias, y hasta la próxima.